El Callejón del Beso


Una visita obligada para los enamorados, no importa si están de luna de miel, o llevan ya algunos años de casados, es visitar el callejón del beso, ubicado en las faldas del cerro del Gallo en el centro histórico de Guanajuato, la anchura del callejón es de solo 68 centímetros y los balcones están casi pegados el uno con el otro.

Cuenta la leyenda que dos enamorados a quienes sus familias tenían prohibido verse, se citaban en los balcones.

Doña Ana era cortejada por Don Carlos, un minero humilde con quien se veía en un templo cercano a su hogar, el padre de Doña Ana la había encerrado con la amenaza de casarla con un viejo rico y noble.

En aquel entonces las doncellas tenía su dama de compañía por lo que le pidió que le entregara una carta a Don Carlos revelándole el trágico suceso, pero una de las balcones de Doña Ana daban hacia el angosto callejón por lo que Don Carlos pregunto quién era el dueño de aquella casa la cual compro a precio de oro.

Así el enamorado podría ver y hablar con su amada.

Una vez el padre de Doña Ana escucho murmullos por lo que entro a la habitación de ella, encontrándola dándole un beso a Don Carlos por lo que el padre enfurecido clavo una daga en el pecho de su hija.

Don Carlos al perder el amor de su amada y en un acto de desesperación se suicidó tirándose del brocal del tiro principal de la Mina de la Valenciana.

Actualmente pesa una advertencia para las parejas que visiten este sitio, el cual traerá siete años de mala suerte e infelicidad si no se dan un beso en el tercer escalón del angosto callejón, pero si lo hacen tendrán 7 años felicidad.

Ubicado en las faldas del cerro del gallo muy cerca de la plaza del Ropero con una fuente en medio y estrechos caminos que salen de ella, una de ellos le lleva al famoso "Callejón del Beso", donde solamente caben en su estreches dos personas.



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